Estamos muy contentos, ayer fuimos a hacernos la ecografia del tercer trimestre, estando de 34 semanas y dos días, y fue muy emocionante!!
Me levanté con el estómago revuelto, Biel estuvo de fiesta toda la noche y por la mañana seguía. Llevo una semana que de tan apretado que tengo el estómago, me dan arcadas, sobre todo por las mañanas. Cuando tengo el estómago lleno estoy mal, y cuando está vacío, peor… Y cada vez voy más a menudo al baño a hacer pipís de canario, pero es que no me aguanto! Así que ayer entre eso y los nervios (y los gatetes que me roban espacio en la cama y la lían jugando), casi no dormí por la noche, estaba agotada, y la espera se me hizo eterna!! Me entraban ganas de hacer pipí, calor, y al final ya, dolor de costillas de estar sentada tanto tiempo tan recta. Iban bastante atrasados y estuvimos esperando más de una hora a que nos tocase, teníamos hora a las 12:30, y salimos a las 14:30 del hospital…
La ginecóloga primero nos sentó a repasar informes, y hablamos un poco de mi superhistorial obstétrico, con mucho cariño y atención. A diferencia de mis ginecólogos del antiguo hospital que a cada visita y cada ecografia me preguntaban siempre lo mismo… ella se había tomado la molestia (o más bien, el interés), de leer toda mi historia antes de hacerme pasar, por lo que no hizo falta que repitiese los datos dolorosos, lo que es de agradecer. Como todas las que me he ido encontrando en este hospital, era una chica joven, muy amable y dulce, y motivada con su trabajo.
Después, me hizo primero la ecografia transvaginal, para ver el cuello del útero y la altura de la placenta. Nada más tumbarme, Biel empezó a tener hipo, y cuando me puso la sonda, empezó a revolverse y no paró en toda la prueba, a este niño no le gusta nada que le molesten! La doctora flipaba de lo que se movía, pero no puso ni una mala cara aunque Biel le dificultase el trabajo. Y nunca, repito, nunca, me la habían hecho una ecografia vaginal con tanto cariño!! Ni una pequeña molestia, y eso que estuvo un buen rato mirando, pero sin hurgar ni hacer movimientos bruscos como me tienen acostumbrada esos ginesaurios…
El cuello está bien larguito, y la placenta sigue baja, pero ha subido un poquito desde la ecografia anterior. Está a 3 centímetros del cérvix, por lo que no hay problema para intentar un parto vaginal, pero, eso si, vigilando porque tengo mayor riesgo de hemorragia al estar tan baja. Para volver a controlar tanto la placenta como el crecimiento y estado de Biel, me dijo que en un mes, si no me había puesto de parto antes, haríamos otra ecografía.
Después pasamos a ver al peque, y eso ya me lo olía: Biel ya está en cefálica!!! Me pusieron la camilla más extendida para que pudiese bajar las piernas del potro y estar cómoda, todo un lujo de trato, vamos! Teníamos una pantalla enfrente nuestro para que pudiésemos ir viéndolo todo mientras ella iba calculando medidas y demás. Se agradece no tener que dejarnos el cuello mirando de reojo y al final no ver nada, además, ella muy atenta, nos iba diciendo que cada cosa estaba bien conforme la veía. Estuvo mucho rato mirando cada detalle, hasta pudimos ver como las válvulas del corazón se movían perfectamente.
Según calculó, Biel ya pesa 2 quilos 200 gramos, que es ni mucho ni poco, está en la media de la normalidad. Así que respiro tranquila, ya no me preocupa si mi barriga es pequeña o grande, él está correcto de medidas y eso es lo que importa. Eso si, como soy tan pequeñita lo tengo completamente encajado en el pubis, y su culo clavado en mis costillas, bien ajustadito, como una pieza de tetris. Me dijo que no le extrañaba que me doliesen las costillas por como estaba colocado, pero es que no tiene más sitio el pobre…
Y al final, lo más emocionante, verle en directo… Nunca antes he podido ver como se movían mis hijos, y me emocionó mucho… En el otro hospital, la pantalla del ecógrafo está a un lado, y la giran para ver ellos, por lo que yo, ni desnucándome llegaba a pillar nada. Y luego cuando la giraban para enseñármelos, ya era con la imagen congelada. Su padre si que los podía ver, y luego me lo contaba, pero yo nunca los he visto en acción. Por lo que ayer fui muy especial para mi, me emocioné muchísimo…
Le vimos perfectamente la carita de perfil, primero con las dos manitas tocándose, y luego las bajó y empezó a tragar líquido amniótico, y sacaba la lengua… La doctora decía: que bien se está portando que nos está enseñando un montón de cosas! Se veían perfectamente los labios, la lengua, la nariz… Lo recuerdo y se me empañan los ojos, fue como verle directamente, increíble… ¡Morí de amor!! ❤
Las imágenes que nos dieron no se ven demasiado claras, tenemos otras de la columna y cosas que ni sabemos que son… Os traduzco estas : está de perfil, con la cabeza a la derecha de la imagen, en la de la izquierda, se ven los puñitos encima de su cara, y la otra, es el mismo perfil pero más cerca, con la mano separada, y se ven los labios y la nariz muy ampliados.
Salimos muy contentos, todavía no me lo creo que estemos a estas alturas y tan bien… Estamos muy agradecidos con el trato del personal, y lo atentos que están siendo. Para un próximo embarazo, llevaré todos los controles allí porque la verdad es que se lo miran todo con más detalle y me hacen sentir mucho más segura.
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Abrazos mamíferos ❤